manifiesto kamikaze

Me gusta el olor a palomitas recién hechas, el sonido del roce de la piel en una noche desesperada. Me gusta como sabe la leche caliente cuando te la llevan a la cama una mañana de invierno. Me gustan los besos que no se piden y las palabras que se roban de los ojos. No me gusta nada la gente sin espíritu, los que vagan por el mundo arrastrando los pies. Odio a los que no luchan, se rinden o abandonan. Siempre me gustó la gente con inquietudes, aquellos que sabían más de cualquier cosa que de su propia especialidad. Me gusta escribir de noche escuchando Quique González a la luz de una vela. Me encanta el incienso y el té rojo. Me gusta dejarme llevar por el ritmo de una canción y pensar que nadie me mira. Moriría por un mate en buena compañía. Siempre me gustaron los aviones aunque fui muy feliz con una simple bicicleta. Nunca me avergoncé de los míos. Me gusta sentarme en un banco con los ojos cerrados y sentir el sol sobre mí. Me gusta soñar…y que sueñen conmigo. Me gusta mirar las estrellas. No me gusta los que caminan mirando al suelo. Odio el hambre, la injusticia y el abuso de poder. No comprendo la división de las riquezas ni el tipo de seres que, llamados humanos, permitimos que los niños mueran de hambre por el simple hecho de tener peor suerte al nacer. Siempre me encantaron las tostadas. Me gustan las margaritas. El tacto de una mano protegiéndome. Detesto el patriotismo. Me encanta sentirme libre, e ir hablando y riendo sola por la calle aunque piensen que estoy loca. Me gusta montarme mis aventurillas por las noches y tener a alguien al lado a quien eso no le moleste. Me gusta rodearme de buena gente. Me encanta tomarme un café en Guridi o beberme un tercio en el Perro. Odio a las personas que carecen de alma ni vitalidad. Soy excéntrica y desordenada, pongo el mp3 a todo volumen y veo pelis de Tarantino. Me gustan los retos. Odio que la gente diga q no tiene nada que hacer porque eso es imposible. Me encanta la atalaya con mis amigos. Me gustan los lunes. Adoro que me despierten dándome besos. Me gusta mucho tener conversaciones trascendentales aunque piensen q soy rara. No puedo vivir sin escribir, sin expresar lo que siento. Odio a quienes juzgan sin conocer, aunque sea yo misma quien lo haga. No cambiaría ni un segundo que he pasado con mis amigas. Me gusta ser sincera. Me encanta tener las paredes llenas de fotos y recuerdos de los míos. Siempre pensé que yo soy mi gente. Me gustan los días de lluvia viendo una peli. Me encanta lo absurdo, como salir un martes a las tres de la mañana porque está nevando. Mi película siempre fue la Vida es Bella porque la descubrí cuando era joven e impresionable, porque me la mostró esa persona especial de quien lo aprendes todo, en medio de una historia de esas de cine, porque me gusta pensar que todo el mundo tuvo alguna vez la oportunidad de vivir algo así. Me encanta escuchar vinilos en el tocadiscos de mi padre. Me gusta el olor a pólvora. A veces me asusta la soledad que necesito. Odio a los que son de ciencias y se creen superiores por ello. No me gusta la gente que dice que todo lo que tiene lo consiguió sin ayuda. Me dan miedo los relámpagos. Me gustan las historias tristes y que me hacen llorar. Las noches de verano en un banco son mis favoritas. Amo a Calamaro. Me gusta que me digan que soy una crédula (aunque yo sé que no). Me encanta estar lejos de un amigo y descubrir que pasado el tiempo nada ha cambiado. Siento especial debilidad por las noches de San Juan. Soy del Celtic. Me gusta mucho formar parte de un equipo. Tengo muchas pesadillas y le doy demasiada importancia a los sueños, aunque eso a la gente le da igual. Soy alérgica a no sé qué. Me gustan los planes increíbles que siempre salen bien. Me encanta mi buhardilla y las playas solitarias. Me gusta fumar en el tejado. Creo en la magia. Siempre quise tener un perro. Adoro los niños. Seré psicóloga, escritora o cualquier cosa que me aleje de la frialdad industrial. Me gusta tener a alguien hablando conmigo en plural. Me encanta que mis amigas estén locas y sean mis amigas. Adoro la lealtad. Me encanta reírme mil veces del mismo chiste y bailar la bilirrubina una vez a la semana. Me gusta gustar, y que me gusten. Odio que me miren a los ojos los desconocidos pero en cambio me sonrojo cuando sé que me observan. Me gusta estar escribiendo en este instante aun sabiendo que tengo que estudiar Sistemas. Me gusta que mi cuarto tenga una corona y una boa amarilla. Me gusta reírme. Venero a Neruda. Me encanta que me tengan que llamar un millón de veces cada mañana porque no me entero. Adoro escuchar que alguien está riendo. Me gusta que me sonrían sin tener ningún motivo. Me encanta ser una kamikaze…y no morir en el intento.